Hola a todos. Ya estoy de vuelta. Como cada año, he pasado un par de semanas de renovación equinoccial en brazos del Mediterráneo. Y aunque el millón de baños al sol me ha convertido en la gitanomulatopolinésica de siempre, también he tenido tiempo para leer. De eso quisiera hablaros. Comienzo confesándoos que solo hay dos autores vivos a los que leo simplemente por ser ellos, porque escriban de lo que escriban siempre van a colmar mis expectativas. Uno es Therry Pratchett... y el otro es John Irving. Pues bien, en relación a este último mi lectura central en estos días ha sido "Las personas como yo". Desde que descubrí por mi cuenta "El hotel de Newhampsire" (en el desconcertante emplazamiento de la biblioteca de mis abuelos ¡¡¡) y me deslumbré ante semejante talento, nunca he querido saber nada con antelación del contenido de todos los libros de Irving que he ido devorando a lo largo de los años: quería ir a ellos sin ningún tipo de a priori; dejarme deslumbrar como la primera vez. Y siempre, siempre, ha brotado la magia. También esta última vez. Por todo ello, aunque por supuesto os recomiendo el libro de todo corazón tampoco yo os revelaré nada a vosotros, confiando que así lo disfrutéis más. Simplemente avisaros de que no es apto para carcas y/o melindrosos y admitir que, tras su lectura, he visto aún con mayor hondura y empatía determinados "orgullosos" festejos que han tenido lugar este finde... El amor es siempre igual. El amor es siempre diferente. Ya lo dice Quino.
Posted on: Mon, 01 Jul 2013 09:36:11 +0000
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