Kathia Elisa Ponce Mendives: "El error del anciano es pretender enjuiciar el hoy con el criterio del ayer". Epicteto de Frigia, filósofo griego. Cuánta sabiduría hay en esta frase, la cual complementaría con otra sacada de la sabiduría popular: ningún cura se acuerda de cuando fue sacristán. La memoria es corta, los olvidos largos y estoy segura de que si cada uno de nosotros examina su conciencia se dará cuenta que alguna vez, en esos años de rebelde juventud colegial, cometimos un error, se nos fue la mano en algo y no honramos al Alma Mater como debíamos hacerlo. Yo no tengo problema en aceptarlo. No hay generación exenta de fallos y la mía no fue la excepción. Pero la grandeza del ser humano radica en su capacidad para aceptar sus errores y corregirlos. Como integrante del Comité Ejecutivo de Fuproin debo señalar que me sorprende cómo muchos compañeros egresados han adoptado una postura sumamente crítica con relación a las generaciones actuales. Es su derecho y se lo respeto. Es cierto, hay algunas unidades que no merecen el honor de ser estudiantes del primer colegio de la República, ese que tantas hermosas páginas ha escrito en la Historia panameña. Pero esos son los menos. Lastimosamente, debo señalar que han sido muy pocos compañeros y generaciones a quienes veo apoyar las actividades que desde hace algunos años promueve la Fundación. Ojalá lo hicieran: se darían cuenta que allí dentro hay una muchachada que, como nosotros hace algunos años, tenía sueños, ilusiones y planes. Qué muchos han perdido o nunca han podido encontrar el rumbo?. Es posible, pero acaso nosotros; los "hermanos mayores aguiluchos" nos hemos interesado conocer las causas de ello?. Nosotros tuvimos la suerte de vivir otros tiempos del Nido de Águilas. Recibir conocimientos de profesores que se habían forjado en esa fragua y que nos transmitían esa mística y ese sentir institutor el que, reconozcámoslo, no siempre honramos como debíamos. No quiero con estas palabras salidas de lo más profundo del sentimiento de una Aguilucha, criada en Plaza Amador, uno de esos barrios de la periferia de nuestro amado colegio, fomentar una diatriba que no se puede solucionar desde la frialdad de una página web. Por el contrario, quiero invitarlos a SUMARSE a las actividades de la Fundación como lo hice yo desde hace poco más de dos años, dando voz, representando e involucrando a mi querida Generación 85 en esas actividades que constituyen una forma de dar gracias por la bendición divina que nos permitió ser de esas cariátides de bronce fundidas en el Templo del Saber que se encuentra a la falda paterna del Ancón.
Posted on: Wed, 09 Oct 2013 19:01:53 +0000
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