LEYENDA DEL JINETE DE LA ROCA Sucedió así que vivían en Cuenca - TopicsExpress



          

LEYENDA DEL JINETE DE LA ROCA Sucedió así que vivían en Cuenca dos amables hermanos, Fernando y Diego, muy compañeros entre sí y amantes de las fiestas y francachelas. Todo fue muy bien hasta que hizo aparición en sus vidas la hermosa doña Beatriz, quien era pretendida por un buen número de hombres de la ciudad, en virtud de su belleza y excelente procedencia familiar. Tanto Fernando como Diego quedaron prendados de ella apenas la vieron, pero ambos decidieron no contar la verdad de sus sentimientos a su hermano, por temor a herirlo. Fue así que no hablaban entre sí de Beatriz, y cada uno esperaba la oportunidad de cortejarla en secreto, sin que su hermano se enterase. Beatriz, a pesar de ser muy bella, no era en absoluto vanidosa, y rápidamente sintió que su corazón pertenecía a Fernando, a la sazón el mayor de los dos hermanos. Cuando le confesó su amor, Fernando al mismo tiempo se alegró y se entristeció, porque sabía de los sentimientos de su hermano Diego para con Beatriz, y también sabía que la decisión de Beatriz lastimaría mucho a su hermano. Decidieron, entonces, huir juntos del pueblo y establecerse en otra ciudad, probablemente en la cercana Valencia, para poder vivir una vida normal sin pasearse despiadadamente por las narices de su hermano en Cuenca. Todo quedó arreglado para una noche cercana, la de la fiesta de San Julián Obispo, en la que todo el pueblo estaría celebrando la canonización del hombre santo. Como señal de que lo estaría esperando en su carruaje, Beatriz le enviaría a Fernando un pañuelo a través de una criada. Al recibir el objeto, Fernando debía encontrarse con Beatriz en un lugar prefijado del camino a Valencia. Al llegar la fecha pactada, Beatriz montó en su carruaje y mandó a su criada a entregar su pañuelo a Fernando. Es aquí donde comienza la tragedia, ya que un triste giro del destino aguardaba a la pareja: la criada, que no conocía bien a los hermanos, entregó equivocadamente el pañuelo a Diego y le dijo que su señora lo esperaba. Diego tomó la noticia con felicidad, ya que pensó que ese obsequio era una prueba de amor de Beatriz. Sin pérdida de tiempo, se allegó hasta el sitio revelado por la criada. Grande fue la desilusión de Beatriz al ver llegar a Diego en lugar de a Fernando, pero no quiso alertarlo acerca de sus verdaderas intenciones para con su hermano. Lo invitó a subir a su carruaje y comenzó una amable conversación. En tanto, Fernando, preocupado por la tardanza de la criada de Beatriz, comenzó a recorrer a caballo los senderos de la ciudad, hasta que dio con el carruaje de su amada. Sin embargo, la visión nubló su mente y lo llenó de ira, ya que en su interior claramente se distinguían la sombra de un hombre y una mujer conversando. Creyendo que Beatriz lo traicionaba, Fernando subió al carruaje y apuñaló al hombre sentado frente a Beatriz. Instantes después caía en la cuenta, horrorizado, de que acababa de asesinar a su hermano. Loco de dolor, tomó su caballo y se lanzó a cabalgar desesperadamente. Al llegar al acantilado bajo el cual corre el río Júcar se lanzó con su caballo a las aguas en el punto exacto en donde una gran roca corta la corriente. El cuerpo del caballo fue arrastrado hacia la orilla, el cadáver de Fernando nunca se encontró. Dícese desde entonces que todos los 18 de Octubre, por las noches, el fantasma del caballero Fernando deambula por los caminos que llegan a la ciudad de Cuenca hasta perderse en los bosques que dan al Júcar, en cuyas aguas desaparece con su montura. KMS Nunca dejen de soñar
Posted on: Mon, 29 Jul 2013 21:00:27 +0000

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