LUZ DEL INSOMNIO … y lo que sólo vive, sólo puede morir. T.S. Eliot Mi lámpara oscurece los insomnios, plasmadas en asombro descubro presencias indecibles, pupilas enormes en un rostro que se crispa lentamente. La vida, suma de biologías diminutas, se detiene en las alas de la luz, en una uña, en la inquieta fosforescencia del silencio. Las palabras van comiéndose mis manos. Miro, ya sin mis ojos, la carne azul del olvido Se posa un dedo de paja en los labios que se abren humedeciendo la rosa (habitante en el no ser junto al polvo de mis sienes). La copa se ha deslizado hacia el mármol y está rota. Rotas las nostalgias y rotos los instantes, mis venas piensan el vacío, la memoria es un vértigo que cesa. Alguien llora: es madrugada en el mundo y es agosto, el todo va perdiendo su noción de absoluto. No queda nada aquí, apenas un gemido que más que escuchar intuyo. El último recuerdo es una anciana que no fui, una ventana abierta desde el túnel. Del corazón cae lentamente una gota de sangre, después otra, mi muerte ha de bañarse en ese río. (A Isolina Garrido Garrido, mi hada madrina) © Geometría del Vértigo, 1995. Martha Rivera
Posted on: Fri, 02 Aug 2013 09:23:23 +0000
Recently Viewed Topics
© 2015