LUÍS BELTRÁN PRIETO FIGUEROA Por: Armando Hernández Este insigne Maestro de maestros, pertenece por derecho propio a nuestro procerato civil contemporáneo, debido a la solidez de su obra y al ejemplo de su vida consagrada por entero a la enseñanza. El Dr. Luís Beltrán Prieto Figueroa fue el maestro por excelencia, porque lo fue desde su juventud hasta cuando los años nevaron su cabeza, siempre lúcida y erguida. Este varón venezolano, nació en La Asunción, Nueva Esparta, el 14 de marzo de 1902, en un hogar pobre y austero, sus conterráneos le vieron ganarse el pan honradamente y entrar al Magisterio por la puerta de la educación primaria primero, y luego por la del profesorado de Secundaria. El Maestro Prieto Figueroa, cursó estudios profesionales en la Universidad Central de Venezuela, que le confirió el título de doctor en Ciencias Políticas en 1934. Es uno de los fundadores de la Federación Venezolana de Maestros. Fue profesor del Liceo Andrés Bello y del Instituto Pedagógico de Caracas. Como Senador por su Estado natal se le vio en el Congreso, de 1936 a 1940. Fue también Concejal por la Parroquia de Santa Rosalía del entonces Distrito Federal y Presidente del Ayuntamiento de Caracas. Su condición de Senador de la República lo libró de ser incluido en el Decreto de expulsión del 37, durante el gobierno del General Eleazar López Contreras. La actividad política del doctor Prieto Figueroa, fue muy bien conocida. Figuró en la Directiva de ORVE (Movimiento de Organización Venezolana), constituido en 1936, y en la directiva del Partido Demócrata Nacional (P.D.N). Durante el lapso 1936 – 1941, fue detenido varias veces por sus artículos periodísticos contra el régimen imperante entonces. Caído el gobierno del General Isaías Medina Angarita el 18 de octubre de 1945, el doctor Luís Beltrán Prieto Figueroa, formó parte de la Junta Revolucionaria de Gobierno surgida como consecuencia de aquel acontecimiento. De esa Junta fue Ministro de Educación, e idéntico cargo desempeñó en la Administración del escritor Rómulo Gallegos. Derribado este gobierno, el Dr. Luís Beltrán Prieto Figueroa, tomó el camino del destierro. Pero en el exterior supo aprovechar los conocimientos pedagógicos, el infatigable educador venezolano, en el exterior le confirieron misiones de alto nivel en Centroamérica y la República de Cuba. De vuelta al país, la actividad política del Dr. Luís Beltrán Prieto Figueroa, continuó desde la alta dirigencia del Partido Acción Democrática, que él contribuyó a fundar. Separado de esta agrupación después de largos años de lucha, siguió trabajando por la golpeada democracia venezolana desde el MOVIMIENTO ELECTORAL DEL PUEBLO (MEP), partido que lo lanzó como candidato a la Presidencia de la República. De la pluma de este insigne venezolano, salieron muchos libros: “Psicología y canalización del instinto de lucha”, “Los maestros, eunucos políticos”, “Apuntes de Psicología” (texto para la enseñanza Secundaria y Normal”) “La Magia de los libros”, “Empínate joven”. Todos ellos inestimables mensajes patrióticos y culturales de poderosa eficacia. Decía el Dr. Prieto Figueroa, “Mi idea es que para la selección de las lecturas del joven no se puede olvidar el lugar donde éste vive y crece. Hay un ligamento sentimental entre la tierra y el hombre que hace posible esa vinculación con la literatura de su pueblo. Es cierto que muchas veces ésta es pobre, por sus temas y por su elaboración, pero de todas maneras el joven encontrará en ellas resonancias de su propio espíritu, algo de lo que está en la raíz de sus preocupaciones”. Como articulista tanto de temas políticos como educativos y jurídicos, el Dr. Luís Beltrán Prieto Figueroa, se distingue por la energía y precisión del concepto. En uno de sus últimos escritos de prensa pueden leerse las siguientes líneas, sin duda valiosas para la biografía del ilustre margariteño: “La corrupción se pregona en la calle y el alarido ha sido tan alto, que está penetrando en los tribunales de justicia. Algunos acusados han sido absueltos, acaso otros lo serán en el futuro y pocos tendrán acceso a los calabozos donde se purga el mal comportamiento y la ofensa a la lealtad que el funcionario debe a la Nación y a sus conciudadanos. Desde la iniciación de mis estudios de derecho cayó en mis manos un libro titulado: “El alma de la toga”, que me impresionó profundamente, no obstante que yo tuve desde mi infancia, como guía, la ejemplar conducta de un juez que me tocaba muy de cerca, y que por 40 años condujo la justicia en Nueva Esparta, terminando su vida a los 90 años, rodeado del respeto y consideración de sus conciudadanos. Ese juez era mi padre… Con mi padre visitaba la cárcel todas las semanas, para tomar constancia del tratamiento a los detenidos y para exaltar la esperanza de los que esperaban el juzgamiento de su causa. Tengo la convicción de que aprendí más en esta forma ejemplar de conducir la justicia, que en todos los tratados que leí acuciosamente para graduarme de doctor en ciencias políticas y sociales y adquirir el título de abogado de la República”. Y concluye: “En mi actividad profesional del derecho estuve siempre del lado de los que buscaban la justicia y la merecían, y combatí a los farsantes que sentenciaron siempre de acuerdo con sus intereses y de aquellos que podían producirles algún beneficio… El combate de la justicia ha sido mi combate”. El Maestro de maestros y doctor en ciencias políticas y sociales, Luís Beltrán Prieto Figueroa, murió a los 91 Año, en Caracas, el 22 de Abril de 1993.
Posted on: Mon, 08 Jul 2013 22:14:44 +0000
Trending Topics
Recently Viewed Topics
© 2015