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Más que hombre de maíz, los mesoamericanos somos gente de milpa. Armando Bartra Sin maíz no hay país En el año 2009, el gobierno de México autorizó las siembras de tipo piloto y experimental maíz transgénico. Un clamor de protesta se alzó desde los campos. Nadie ignoraba que los vientos se ocuparían de propagar la invasión, hasta que el maíz transgénico se convirtiera en fatalidad del destino. Alimentadas por el maíz, habían crecido muchas de las primeras aldeas en América: el maíz era gente, la gente era maíz, y el maíz tenía, como la gente, todos los colores y sabores. ¿Podrán los hijos del maíz, los que hacen el maíz que los hizo, resistir la embestida de la industria química, que en el mundo impone su venenosa dictadura? ¿O terminaremos aceptando, en toda América, esta mercancía que dice llamarse maíz pero tiene un solo color y no tiene sabor ni memoria? Eduardo Galeano (de los hijos de los días) • En México se consumían aprox. 306 kg de tortillas anuales por persona hasta 2008; en 2010 se redujo el consumo a 279 kg anuales por persona. • México es el 1 importador de maíz a los EUA • Anualmente en México se consumen treinta millones de toneladas de maíz. • En 2012 México importó 9.8 de toneladas de maíz Desde la champa re-verde, puebla, para el mundo: El maíz ha jugado un papel fundamental a lo largo de la historia en las diversas culturas de este continente. Representado en mitos, vestimenta, códices y en toda la tradición y cultura oral y escrita de los hombres de milpa ha sido de los símbolos más sagrados. Desde hace 500 años ha recibido varios embates a su integridad, desde la colonia hasta nuestros días aunado a todas las alteraciones del ecosistema con productos químicos. ¿Sabías que México está al borde de una catástrofe agrícola? México orgulloso productor del 15 % de las especies que forman el sistema alimentario mundial sufre un desabasto en la producción de maíz base principal de la alimentación. A pesar de que existen 51 variedades de maíz criollo, por cuestiones de política económica se ha limitado el consumo a una sola variedad beneficiando así a la gran industria agrícola, dejando olvidados, perjudicados, o inexistentes a los productores locales, los sobrevivientes se han convertido en productores de autoconsumo . En este caso consideramos que el agrogenocidio tiene un tinte económico político; esta no es la primera vez que México sufre una crisis, pero es la primera vez que nos enfrentamos a un daño irreparable al patrimonio alimentario y a la biodiversidad. Esta posible extinción está patrocinada actualmente por grandes corporaciones agroquímicas transnacionales como Bayer, Syngenta, Pioneer y Dow Agroscience que tratan de controlar la agricultura del mundo, y en particular al maíz, a través de la promoción de variedades de semillas transgénicas. Un claro ejemplo es el actual interés del grupo Monsanto, La empresa solicitó dos permisos para sembrar de manera comercial maíz transgénico en 700 mil hectáreas de Sinaloa, lo que significa todo el territorio cultivable del estado. En tanto, Pioneer espera autorización para la siembra de una variedad de Monsanto en 351,284 hectáreas de Tamaulipas. La plantación de transgénicos ha causado gran polémica a nivel mundial. Tanto que en la unión europea ha luchado para evitar la siembra. La entrada de los transgénicos al escenario agrícola nacional asestaría el golpe mortal a la agrodiversidad y también a la salud del pueblo mexicano ya que los productos son catalizadores de enfermedades y daños a la salud. Por ejemplo el cáncer ligado al consumo transgénico. Este escenario apocalíptico que pinta un futuro muy corto para los herederos de los pueblos mesoamericanos está en una etapa aun contenible, el cultivo de la milpa tradicional en México de manera orgánica temporal es la trinchera de la cual podemos promover la resistencia. Estos conocimientos agrícolas transmitidos a través de miles de años, son la pieza fundamental que nos ha inspirado a realizar acciones que buscan la concientización del consumo responsable ¿Si tan dan a elegir entre comer maíz “barato” contaminado y comer maíz orgánico con altos niveles de nutrientes y sembrado por productores locales? ¿Qué escogerías? La dinámica de la vida urbana nos ha distanciado y hecho ignorantes de los procesos productivos que atraviesa un alimento desde el campo hasta nuestra mesa. Nuestra forma de vida consumista nos causa la falsa necesidad de buscar alimentos baratos y rápidos. Ésta es la vulnerabilidad que nos hace desvalorizar los alimentos por su cuestión mercantil. Se convoca a todos los milperos autónomos de la ciudad, sembradores urbanos, colectivos e individuos interesados a realizar una siembra de milpa urbana masiva ocupando todo el espacio público o en desuso disponible (jardineras, macetas, parques, camellones, andadores, áreas verdes, jardines, azoteas y traspatios) mismas que cuenten con condiciones óptimas de luz, suelo y agua. Aprovecharemos el temporal (periodo de lluvias) para realizar la siembra partir de la segunda semana de mayo. Para llevar a cabo esta siembra, los milperos proponen conseguir semillas de maíz, frijol y calabaza organicas, de variedades criollas y de productores locales. Hacer dispositivos de germinación (Nendo dango) para la siembra en la ciudad de Puebla y Cholula y si el espacio lo permite siembra traspatio y azotea. En cualquiera de los casos es pertinente realizar el seguimiento del cultivo (Fotos, labores de cuidado) y hacer el acompañamiento a todo sembrador interesado. Se festejará la cosecha en la que compartiremos nuestra experiencia agrícola y comunitaria al final de periodo. MILPEROS AUTÓNOMOS ¡Sembrando Resistencia!
Posted on: Wed, 03 Jul 2013 22:39:59 +0000

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