No llego al 1; Una gran descarga eléctrica invadió mi celebro y alcé la cabeza hacía el techo. Mis ojos empezaron a ver pasar un montón de imágenes escalofriantes que siempre acababan en muertes: guerras, epidemias, accidentes. Las caras de la gente pasaban delante mio y me miraban con ojos apenados. Sangre, mucha sangre, y dolor; podía sentirlo, como si estuviera yo en su lugar, como si me encontrará en cada uno de esos sitio. Bombas, misiles, bacterias... Avances tecnológicos que habían hecho que todo eso pasará, y detrás de cada imagen, el símbolo del triangulo se alzaba, incluso en las banderas nazis de Hitler, a lo lejos, en segundo plano. Laboratorios de experimentación con humanos, torturas... Era increíblemente doloroso. Intenté cerrar los ojos pero las imágenes estaban en mi cabeza. Comencé a desesperarme y me levante dándome golpes contra la pared. Matt me sujeto de los brazos y me tumbo en la cama, intente resistirme, volvió a inyectarme aquella cosa y tras una breve descarga volví al mundo real. Solté un aullido de dolor y me retorcí entera. Me abracé a mis piernas y empece a llorar desconsoladamente. Matt cogió la barrita de chocolate y la tumbo a mi lado en la almohada. -El ser humano... cuando tiene el poder, el conocimiento, nunca lo usará para bien. Lo usará siempre para obtener más y más sin importarle que halla gente que no tenga nada, sin importarles cuantas vidas tienen que arrebatar, o cuantos derechos se van a saltar. -¿Por... por qué?-pregunté entre sollozos. -Porque el rey de la selva no es rey hasta que no ha matado a sus rivales. Acerqué mi mano hacía la suya y la cogí con fuerza. -Les odio.-dije. Matt sonrió y se acercó a mí. -Cuando entre en la brigada de tu búsqueda intente escalar hasta el máximo puesto y antes de que me lo dieran tuve que pasar una prueba; Tenía que ver esa información, retenerla, aceptarla, y quedármela y llevarla siempre conmigo. Tenía que saber lo que realmente eran lo clanes, más allá de los secretos que nos habían contado desde niños. Que si eran buenos, que si querían la paz mundial, erradicar el hambre, JA. Si al ver esas imágenes dudaba de mi lealtad, me darían a elegir entre morir, vivir en una celda, o olvidar toda mi vida y aparecer en algún punto del tiempo y el espacio sin idea de quien era. Nunca en mi vida había tenido que hacer una elección tan difícil. . Le miré con lo ojos abiertos como platos, suspiré alucinada, y acto seguido, no sé cómo ni porque pero le besé apasionadamente. Sus labios, la adrenalina, su perfume, y la sensación de estar flotando fueron aflojando poco a poco mi odio hacía los clanes y la sensación tan mala que me había dejado aquel recuerdo. Matt me tumbo en la cama y sigio el ritmo de mis labios que se aceleraban con cada latido de mi corazón. Me agarré a su espalda y sentí como una barrera invisible me protegía de todo lo que acababa de presenciar. Sentí como el sabor de sus besos me anestesiaban y aliviaban lentamente el dolor que invadía mi cuerpo y mente. Entonces paso: Acerco su mano hacía mi cintura y yo paré en seco; le miré, me lleve una mano a la boca y salí corriendo medio llorando.
Posted on: Thu, 26 Sep 2013 21:03:21 +0000
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