Si tuviera que hacer un inventario del tiempo que tardo nuestro enamoramiento pasional, comenzaría por recordar el instante aquel en que cruzamos la mirada y tus ojos se impusieron, no podría dejar de lado las madrugadas eternas en que nos contábamos paso a paso nuestras tan distantes vidas y que decir de aquella mañana que el sol nos encontró abrazados en la ciudad de las flores observados por testigos mudos. Probé de ti el enajenante sabor prohibido, nos besamos hasta la locura, fuimos una sola alma, en tus piernas encontré un remanso de paz y el recuerdo y la sensación de tus muslos temblorosos aun me despiertan a las tres de la mañana, como cuando te hablaba para beber agua. Te dedique tantas letras y noches que llegue a perder el sentido del tiempo, loco de atar pedia que encendieras un circulo de fuego alrededor de mi para permanecer en tu sortilegio, desesperado gritaba las nueve letras de tu nombre, y el eco de la noche me respondía con mi nombre y era tu voz...
Posted on: Mon, 09 Sep 2013 15:07:06 +0000
Trending Topics
Recently Viewed Topics
© 2015