Transparencia en Pemex y CFE: los expedientes abiertos Dentro del proyecto de la reforma energética se han planteado diversos temas y hasta ahora el que más se ha discutido en la plaza pública es el relacionado con la renta petrolera y el registro de las reservas petroleras como parte de una empresa diferente a Pemex. En el caso de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), aunque es una reforma mucho más agresiva que implica incluso la desaparición de los subsidios al sector doméstico y un mercado abierto a la competencia en generación y distribución, del tema de transparencia poco se ha hablado. A decir de los expertos, la transparencia es el final de muchas prácticas que se habían puesto en marcha y habían frenado la corrupción en muchos de los concursos y licitaciones que de pronto eran totalmente amañados. Una lista de los expedientes abiertos más notables es la siguiente: Pemex Refinación con Impulsora Jalisiciense en el joint venture llamado Mexicana de Lubricantes (Mexlub), una sociedad que desde el principio le provocó pérdidas a la paraestatal y en 20 años sólo le dio un año de ganancias netas, a pesar de tener el monopolio de los aceites y lubricantes en las estaciones de servicio. Es un misterio cómo es que unos estados de resultados que eran de pérdida fueron cambiados para ser ganancia sólo para el socio privado. ¿Dudas? En realidad todas. El asunto de la transparencia es considerado uno de los grandes problemas estructurales de Pemex tanto en sus operaciones como en sus contratos. Mexicana de Lubricantes no le rinde cuentas a nadie y las familias Martínez Garza y Leaño son más fuertes que Pemex, que representa a la sociedad entera. Otro caso es la refinería de Minatitlán, que costó el doble y sigue sin terminarse. Lo que nos dicen los ingenieros de Pemex es que los contratistas que tendrían que haber hecho su trabajo lo hicieron no mal sino lo que le sigue; con excepción de Samsung Engineering, el resto no cumplió nunca con el calendario. “Se hincharon todos”, nos dijo un ingeniero a cargo de la obra. Tradeco, ICA Fluor, Dragados, Minarico, Ebramex y PDI. “Los que ni vergüenza tuvieron fueron los de Dragados Españoles, a esos ni cómo ayudarlos, imposible”. La obra parece que costará 3,700 millones de dólares, y parece porque le faltan aún los cierres administrativos y acuerdos finales. No es el único pendiente. El 15 de mayo pasado en la Cámara de Diputados se votó un punto de acuerdo para que César Nava explique su actuación en diversas causas y contratos por su paso como director jurídico de Pemex y su relación con Siemens y los presuntos actos de corrupción de los alemanes, que fueron revisados en una Corte del sur de Nueva York donde finalmente fueron rechazadas las acusaciones. Nava se ha defendido públicamente de su no participación en estos acuerdos, pero es justo esta parte la que debe contar: ¿por qué nunca se enteró de nada?
Posted on: Tue, 01 Oct 2013 01:10:49 +0000
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