Acusaciones cruzadas por el crimen del barra de Colegiales El titular del club, que es kirchnerista, apuntó a Pro; pero en el macrismo rechazaron la denuncia Por Nicolás Balinotti | LA NACION Esta vez fue en Munro. La política volvió a quedar envuelta en una trama de barrabravas. La muerte a tiros de Fernando Morales López, el jefe de la hinchada de Colegiales, ya derivó en un cruce de acusaciones políticas. El presidente de Colegiales, Rodrigo González, candidato a concejal del Frente para la Victoria (FPV) en Vicente López vinculó ayer a los presuntos agresores de Morales López, conocido como el Loco Pocho, con el secretario de gobierno de la municipalidad de ese municipio, el macrista César Torres. Los que atacaron a «Pocho» funcionan como fuerza de choque de César Torres. Y en el momento del enfrentamiento estaban en una camioneta de la municipalidad, dijo González a LA NACION. El diputado provincial kirchnerista Fernando Chino Navarro, se había expresado anteayer en el mismo sentido. Además de ser directivo de Colegiales, González es un activo militante político de la zona. Perteneció al Frente Grande y a la Alianza, y ahora es candidato a concejal de Vicente López por el FPV. Suele jactarse de sus influencias políticas para llegar a Julio Grondona, el titular de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA). Pero desde la intendencia de Vicente López rechazaron a LA NACION las acusaciones de González e insistieron en que el asesinato respondió puramente a una interna por el control de los negocios que genera la barra. LA NACION intentó sin éxito comunicarse con Torres para que diera su versión de los hechos. La fiscal Marcela Semería está a cargo del caso. Apunta su investigación a un conflicto personal entre la víctima y sus agresores, de los cuales dos ya están detenidos. Se trata de Alejandro Aranda (Harry) y Martín Cabrera (el Negro Martín), quienes habían sido expulsados de la barra de Colegiales por haber extorsionado a dirigentes y futbolistas, según contaron en el club. Para la Justicia, por el momento, el episodio nada tuvo que ver con la política. Por ahora no existen indicios ni pruebas para connotarlo políticamente, dijo anteayer la fiscal Semería a LA NACION. Por el crimen de Morales López hay dos detenidos y un prófugo, que sería de nacionalidad uruguaya y quien habría hecho los seis tiros que mataron al barrabrava del club de Munro. El Loco Pocho fue velado ayer en el estadio de Colegiales. Autorizamos a hacer el velatorio en el club porque era un referente de la hinchada y del barrio, justificó el presidente del club de Munro. Una ironía: antes de atacar a tiros a el Loco Pocho, sus agresores habían estado pegando afiches sobre un centro de monitoreo de seguridad en Vicente López, según informaron fuentes policiales
Posted on: Wed, 16 Oct 2013 09:58:17 +0000
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