¿Por qué Bolivia no progresa? Vaya pregunta: ¿por qué Bolivia no progresa si tenemos casi todo? A saber: riquezas naturales; amplio territorio; un gran lago y otros menores; ríos navegables y caudalosos, otros no tanto, pero de límpidas aguas; oro en abundancia; plata y una variedad increíble de metales; grandes bosques; llanuras; valles; hermosas montañas fértiles y muchas con nieves eternas; valiosas minas (uno de nuestros mineros llegó a figurar entre los más grandes millonarios del mundo: Simón I. Patiño); petróleo y gas (para la exportación y el contrabando). Todo ello en cuanto al aspecto material. Si vamos a referirnos a los recursos humanos, tenemos: universidades (inclusive más que en algunos países europeos); institutos (hasta militares y policiales); normales, colegios, escuelas y academias (para todas las disciplinas del saber). En fin, toda institución donde se realizan estudios teóricos y labores prácticas. De esas instituciones educativas egresan abogados, médicos, economistas, auditores, contadores, bibliotecólogos, ingenieros, periodistas, arquitectos, ingenieros, psicólogos, sociológos, constructores, literatos, filósofos, militares, aviadores, marineros, policías, detectives y cuanta profesión existe en el mundo. Hay también conventos para religiosas y religiosos de diferentes órdenes. Como se podrá apreciar, tenemos mucho... ¡pero el país no progresa! Y es más, cada vez estamos peor que antes, tanto que para sobrevivir, todos los gobiernos (sin excepción) tienen que esperar la generosa ayuda extranjera y el préstamo salvador para poder elaborar anualmente el presupuesto nacional. Entonces es necesario detenerse aquí para analizar las posibles causas y ponerse a pensar seriamente porque ¡algo está fallando en Bolivia!: - No hay principio de autoridad. Nadie obedece a nadie y todo se consigue con presiones, huelgas de hambre, marchas de protesta, “ocupaciones” de oficinas estatales y toda clase de medidas de fuerza. - Nuestra Justicia... bueno, ya sabemos cómo funciona (o no funciona): impera la invencible y poderosísima “ley del embudo”. Prevalecen el dinero, las influencias, el “chicanerío”; y las sanciones legales sólo las reciben inmisericordemente los pobres, los humildes, los indígenas y los que no tienen “muñeca”. - El ordenamiento económico en el país es un espanto: la corrupción en la administración pública es algo que todos ven, pero nadie le pone freno. Hasta el funcionario estatal de más bajo rango tiene su gran “negociadito” en su haber. De los burócratas de las altas esferas... ni hablar; eso se cuenta en miles y millones de dólares (en moneda nacional sería una humillación). - El contrabando: entra y sale de Bolivia como si no existieran fronteras. En este rubro ya tiene características de escándalo el saqueo de obras pictóricas de la época colonial. En relación con reliquias arqueológicas, sólo se salvó la Puerta del Sol de Tiwuanaku (por las dimensiones y su peso), porque de lo contrario en este momento esa valiosísima pieza estaría siendo exhibida en algún museo europeo. El oro, no sabemos cómo, sale. El periodismo boliviano ha denunciado hasta el cansancio la salida ilegal del petróleo y gas en todas sus formas de extracción del subsuelo. ¿Y las instituciones militares, policiales y aduaneras? (nos mandan saludos muy efusivos). *** Al principio de esta nota nos referíamos a universidades y otros centros de estudio; pero no destacamos el hecho de que casi todas esas instituciones están sostenidas económicamente por el Estado, es decir con el dinero del pueblo. Entonces ¿el Estado eroga dinero absurda e insulsamente? Porque si del erario salen los fondos para capacitar, supuestamente, a los ciudadanos, futuros profesionales que deben regir el destino nacional y éstos no responden positivamente al Estado que los preparó para ello, quiere decir que... ¡algo está fallando en Bolivia! *** Sobre esta falla, mejor dicho atraso de Bolivia, existen muchas teorías. Unas lo atribuyen a “la raza” (¿de los gobernantes?); otras a la falta de patriotismo y a las religiones; y las más al egoísmo y a la corrupción administrativa. Y no faltan los estudiosos que afirman que nuestro país nació con un destino adverso. En cuanto a “la raza”, ¿a cuál se referirán? Mucho se discute sobre este tema, porque en estos tiempos hablar de “raza” es algo muy difícil de establecer porque desde el mismo término ya es motivo de discusión. ¿Se referirán al indigenismo, al mestizaje o a la inmigración europea o asiática? El tema origina mucha polémica. Mientras tanto, que analice el ciudadano boliviano qué es lo que está sucediendo en nuestro país. En esta misma columna trataremos posteriormente y en forma específica, cada una de esas apreciaciones causales que comentamos hoy. ¿Por qué Bolivia no avanza social, económica, política y productivamente? Es un tema para un profundo análisis y una rigurosa meditación.
Posted on: Sat, 29 Jun 2013 18:19:23 +0000