Puff como tardan las niñas en el baño, ahora sí, luego pisteamos... Mi hermosa Venus, mi diosa, mi amante, anoche soñé contigo, lo rememoro una y otra vez. Descubrí que no eras de carne y hueso, como imaginé desde el primer momento en que te ví. Al recorrer tu cuerpo, supe que estabas hecha de seda, satín, porcelana, pétalos de rosa, rayos de sol y fresco rocío de la mañana. Recuerdo claramente cómo recorrí tus suaves muslos de seda con las yemas de los dedos, cómo, lentamente, recorrí tus piernas surcando las curvas hasta las pantorrillas y en seguida mis manos se deshicieron en caricias sobre la porcelana de tus hermosos y diminutos pies. Tu olor, olor de flor nocturna, que aspiré desde tus costados hasta los senos turgentes y suaves como el satín, tenía la esencia del jazmín y hacía el efecto de una noche de mayo sobre mí. Con delicadeza, aspire el perfume que se desprendía desde tu cuello, me dirigí hacia la nuca y a tus cabellos, llenándote de innumerables besos en el trayecto. Descubrí también, que tu espíritu es de fuego, crepitando en el pecho, consumiendo mis ansias y tus ansias, ambas combustible inagotable de esta pasión. Las sábanas eran velas y el tálamo un barco abandonado a merced de la tempestad; las caricias, como relámpagos, electrizaban el ambiente y nuestros cuerpos. El fuego, el calor, la sed, el cansancio, las ansias... los capullos de tus flores despertaron, tus pétalos, rosados, entreabiertos...todavía siento en mis labios su dulzura, la intensidad de tus movimientos cuando, con la punta de la lengua, recorrí la suavidad de sus bordes, exploré la cavidad húmeda y bebí el fresco y embriagador néctar que la madrugada había acumulado dentro de ti. Tus ojos, ¡¡tu mirada!!... felina, me retaba, me aprisionaba, al igual que tus brazos y todo tu cuerpo se hallaban sobre mí, te sabías dueña de mi vida. Me supe perdido... estaba a merced tuya Devoradora de Almas y Corazones pero, con gracia y ternura, en lugar de aniquilarme, tu cuerpo rozó mi cuerpo, tu cabello acarició mi rostro y te deslizaste lentamente a mi lado, permitiendo que descansara contigo, abrazados. Cobijado por tu calor, tus brazos y tus piernas, me sentí en el cielo, envuelto entre nubes, ¡¡y de pronto!! tu sonrisa y mirada angelicales bañaron de rayos solares mi sueño y, repentinamente, me despertaron... https://youtube/watch?v=ttbo9BbDnmo
Posted on: Sat, 24 Aug 2013 17:41:34 +0000
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