Cuando en 2005 Néstor Kirchner decidió pagar deuda (ya con un crecimiento importante por la exportación de granos y la devaluación de 2002), con amigos de Comunicación Social discutíamos acerca de esa medida. Me parecía bien. Había que acomodar el barco para empezar a pensar un modelo económico de crecimiento y, ante todo, sano a partir del desendeudamiento. Mi opinión fue retrucada fuertemente por mis amigos de izquierda: “No hay que pagar una deuda que es ilegitima”, me dijeron, cortito y al pie. Enseguida se citó el ejemplo de Ecuador (que investigó su deuda) y el fallo del juez Ballestero tras la investigación de Olmos. No era kirchnerista, tampoco el típico estudiante de izquierda. Eso sí, leía (y leo). Muchos de los amigos que me sacaron cagando en ese momento ahora apoyan el actual “modelo nacional, popular y de inclusión”. No sé qué pensarán del anuncio que acaba de hacer Cristina de abrir nuevamente la negociación para pagar. Los argumentos para abrir nuevamente el canje me parecieron correctos. Los mismos que utilizó Kirchner, quien como Cristina, se jactó de pagar deuda. Me gustaría saber qué piensan mis amigos, que ahora son kirchneristas duros. Si están dispuestos a no tratarme de lo peor, avisen, comamos un asado.
Posted on: Mon, 26 Aug 2013 23:10:30 +0000
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