El Deber De Los Hombres Y me dediqué de lleno a explorar e investigar. Eclesiastés 1:13 Salomón era un enigma: era el hombre más sabio, y sin embargo, también el más necio. El predicador escocés Alexander Why te dijo: «Si un barco zarpara en una mañana soleada y lo único que quedase de él fueran una o dos tablas traídas por la marea esa noche, el barco sería Salomón». En su libro de Eclesiastés, Salomón aplicó la sabiduría que Dios le dio a la búsqueda del significado de la vida. Exploró todas las avenidas buscando satisfacción: la educación, el dinero, las obras públicas, la fama, la escritura creativa, el placer sensual y la religión. Pero nada de esto le satisfizo. ¿Está usted explorando, investigando y experimentando con las mismas cosas? Boris Becker, el tenista estrella, dijo: «Ya había ganado dos veces el torneo de Wimbledon, una de ellas como el jugador más joven de todos. Era rico. Tenía todas las posesiones materiales que necesitaba...Es la vieja cantinela de las estrellas de cine y la música que terminan suicidándose. Lo tienen todo y a pesar de ello son muy infelices. Yo no tenía paz interior». En Eclesiastés 12:13, Salomón, al final, llegó a la conclusión de todo esto: «Teme, pues, a Dios y cumple sus mandamientos, porque esto es todo para el hombre». Solo una vida dedicada a Dios por medio de Jesucristo satisface al corazón.
Posted on: Sun, 15 Sep 2013 19:57:38 +0000
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