Imposible no compartir con Uds. estas palabras tan llenas de sentimientos, escritas por nuestra compañera Sandra Chahín, que reflejan de una manera muy especial, nuestra tarea de cada día y el reconocimiento más valioso que tenemos... nuestros usuarios... "Estar en tu lugar de trabajo y que aparezca un joven profesional, que te dice que vuelve porque aquí pasó una etapa linda, porque lo ayudamos a transitar el camino de la secundaria… Ver llegar ese adolescente que, cuando estaba en la panza de su mami, ya era de los nuestros… Contarle a un chico de primaria que, cuando tenía un año y pico, su mamá o su abuela lo traían a la salita Infantil a husmear en ese mundo de maravillas y fantasía… Recibir a esa señora muy mayor, que te dice que vuelve al lugar porque, hace años, venía para dar ayuda a sus nietos y ahora… tiene mucho tiempo para leer y pasarlo bien. Atender el llamado telefónico de esa abuela que no tiene quien le alcance sus novelas románticas y rápidamente, alguno de los compañeros se la lleva hasta su casa. Atender a aquel anciano, almacenero toda su vida, que venía a devolver sus libros, envueltos y ataditos con hilo de algodón, en busca de nuevas historias de suspenso. O a aquella dama, de más de 90, coqueteando con su bastón y su cartera, que entraba derechito a los sillones, esperaba sin apuro a que alguna de nosotras le acercara libros de poesías, de historias lugareñas o alguna historia romántica “de las de antes”. Ayudar al que quiere reforzar sus conocimientos en un oficio, en una artesanía, al que decidió empezar su secundaria ya grande, al nene que comienza a investigar, a la señora que quiere aprender a tejer, al que quiere llevar una película para el fin de semana. A los vecinos, que vienen a leer los diarios, al italiano que consulta el diccionario porque, a pesar de tantos años en Argentina, quiere saber qué significa una palabra para no escribir algo incorrecto en sus poesías o sus escritos… Conversar con los que buscan novedades o libros “de antes”. Escuchar lo que nos cuentan, intercambiar opiniones, reírnos, o poner el oído porque es alguien que no tiene a quien hablarle. Disfrutar de la presencia de los más chicos, que vienen a buscar historias contadas cada semana… Visitar a los chicos y comunidades del campo, para que ellos disfruten del mismo derecho que los del pueblo, con los libros que llegan para ser leídos o mirados… Esto es parte de lo que hace un BIBLIOTECARIO, que gratifica cada día, porque aunque no todo salga bien, sabemos que hay un momento en el que vemos los frutos de la tarea, que no hay mejor reconocimiento que sentir ese deleite de ver a los que vuelven, a los que siguen apostando, a los que se ilusionan, a los que aprenden, a los que se divierten, es decir, a los lectores, nada más ni nada menos!!" BIBLIOTECARIOS, FELIZ DIA!!! Sandra Chahin
Posted on: Fri, 13 Sep 2013 02:33:25 +0000
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