LOS HUMILDES DE MUJICA Pocas veces la realidad abofetea con tanta contundencia el idealismo presidencial como en estas horas. Mientras el presidente Mujica pregona en su audición radial el monopolio de la solidaridad en manos de los "humildes" (por contraposición al supuesto egoísmo de quienes no lo son), unos 800 auténticos humildes que viven el drama de las inundaciones, se niegan a abandonar sus pobres viviendas por temor a que estas sean saqueadas por otras personas, seguramente de la misma humilde condición que la propia. Semejante espectáculo de pobres temiendo el accionar desalmado de otros pobres no se había visto antes. La realidad niega una y otra vez el audaz optimismo idealista del presidente de la República, incapaz de encasillar los hechos del vivir cotidiano en sus categorías mentales que todo lo solucionan en una audición de radio o en una entrevista de prensa. A pesar de estas claras respuestas del mundo real, Mujica no ceja en su empeño de exhibirse como el campeón de una categoría social en la que pone todas las bondades del ser humano. No sólo es una falsedad desmentida por los hechos, sino una estrategia divisionista y sectaria, que promueve la división y alienta el odio social, poderoso combustible que termina provocando estragos en los aprendices de brujo que se ven tentados a utilizarlo como herramienta política.
Posted on: Wed, 18 Sep 2013 15:42:08 +0000
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