Particularidades de Dios “Pero no te enojes” ¡tanto! Nos enojamos cuando algo nos frustra, los motivos son muchas, desde las más leves hasta los más intensos y amenazadores. Pero el factor determinante es la frustración. El enojo es una energía que se activa cuando tu deseo de lograr o esperar algo se obstaculiza o es amenazada, entonces esta energía se convierte en una sobrecarga. Pero esto disgusto a Jonás, y lo hizo enfurecerse. No importa tanto los motivos del enojo de Jonás, lo interesante es lo que produjo su reacción al sentirse frustrado. Tenía una sobrecarga de enojo, y esta energía produjo cinco cosas en Jonás: Se aisló emocionalmente Bloqueo su mente No pudo pensar con claridad Se victimizo Se distancio hasta del mismo Dios. Dios le habla dos veces a Jonás, la primera vez le dice; ¿Tienes razón de enfurecerte tanto? Al no saber controlar ese impulso de energía, muchas veces en lugar de encontrar la solución se contribuye a tener un problemas más. Hay gente que se enoja por muchas cosas, a veces sin importancia, a veces porque ya es un habito, y otra veces por ser una característica resentida, y no está mal enojarse, lo malo es no solucionar nada, sino lo contrario, ahora tener más problemas. Dios le habla por segunda vez; ¿Tienes razón por enfurecerte tanto por la planta? Jonás tenía un motivo específico, se había secado su plantita, y se podría decir que hasta tenía razón. La plantita representa la razón de tu enojo, y quizá tengas razón, por supuesto que tenes razón, pero esto, ¿te aisló?, ¿bloqueo tu mente?, ¿no podes pensar claramente?, ¿te sentís victima de las cosas?, ¿te distancia de Dios? Una anécdota; Un periodista que trasmitía los partidos de Gabriela Sabatini, continuamente repetía, “Me gustaría ver a Gaby más enojada, así jugaría mejor” El suponía que enojándose con la rival, Gabriela ganaría en eficacia, y es todo lo contrario: La coordinación y la precisión para un buen desempeño en cualquier tarea, es acompañada del dominio de las energías emocionales en relajación y calma. Cuando aprendes a dominar la sobrecarga del enojo, te lleva a determinar el resolver el desacuerdo que te hizo enojar. Lo interesante y lo particular de Dios con Jonás, fue que con estas preguntas le estaba enseñando que lo más importante es “Transformar el enojo que destruye, en enojo que resuelve.” Acordarte de esta frase de un cómico muy famoso: “Pero no te enojes” ¡tanto! ¡Disfruta la Vida!
Posted on: Mon, 18 Nov 2013 15:18:58 +0000
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