Se sentó en aquel banco en medio de la ciudad y decidió intentar dejar la mente en blanco, obsevando simplemente a todos los transeúntes que se cruzaban en su camino... ¿Cuántas historias albergaban todos aquellos rostros que desconoce? La mirada perdida de aquel que camina solo, ausente, intentando encontrarse a sí mismo, la sonrisa de dos enamorados que pasean de la mano compartiendo confidencias cómplices, una niña que llora mientras su madre intenta consolarla sin resultado, tal vez le han negado algo que deseaba con toda su alma o, simplemente, está cansada de caminar,sin darse cuenta de qué la infancia es la etapa más hermosa de la vida, y que, cuando esta termine, el mundo real sí que hará brotar lágrimas de sangre de sus ojos, entonces aquel capricho de la infancia sera un bello recuerdo... Miraba a su alrededor y se preguntó ¿cuántas almas en aquel mismo instante se estarían sintiendo como ella? cogió un pitillo, lo encendió, y respiro profundo el humo hasta el fondo de sus pulmones, como intenando mantenerlo dentro para siempre, buscando que quizás algo de calor volviera a invadir su cuerpo helado como un tempano de hielo. De pronto comenzó a soplar el viento intensamente y se le vino a la memoria su cometa, hoy podría volar muy alto pensó, y cerró los ojos a la vez que una tenue sonrisa invadía su rostro, imaginando aquella hermosa imagen, su cometa junto con sus sueños elevándose en el cielo.De pronto comenzó a notar que algo le humedecía el rostro, abrió los ojos para observar como llovía, pero para su sorpresa aquellas gotas que sentía eran sus lágrimas, ni siquiera sabía por qué lloraba, estaba triste y melancólica, pero no se sentía mal, al contrario, en ocasiones le gustaba la soledad para poder conversar consigo misma, tal vez aquellas lágrimas no eran más que un grito desesperado pidiendo auxilio, quizás por una vez si necesitaba del dulce contacto de unos brazos que la agarrara y le dijeran: tranquila, todo va a estar bien.Comenzó a pasear por la ciudad sin rumbo, intentando buscar algo que lograra consolar su angustia, algo que le recordara de nuevo que la vida merece la pena...Llegó a un parque, estaba vació, tan solo el ruido de las hojas movidas por el aire la acompañaban, y comenzó a bailar al compás del viento, y de pronto todo recobró sentido... Era libre, el mundo estaba a sus pies, y nada ni nadie podría cambiar nunca eso mientras ella no dejara de confiar en sí misma... Y como un pájaro que logra escapar de la jaula en la que está cautivo y logra volar en libertad, volvió a sentirse en sintonía con la vida...Nadie podría cortar sus alas.. se acostó sobre la fina hierba húmeda por la lluvia, y de nuevo cerró los ojos...En su pensamiento bellas cometas de colores hondeaban sobre un cielo azul sujetadas por sus sueños, sus anhelos y sus ilusiones... Nunca más volveria a estar sola... Siempre le quedaría la esperanza.
Posted on: Sun, 07 Jul 2013 23:25:27 +0000
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