Siento una enorme pena que la FIL del Zócalo se haya cancelado, particularmente por que esa feria, que nos tocó fundar con mi querido amigo José Angel Leyva , siempre ha tenido un espacio muy especial en mi corazón. Lamento mucho que la Secretaría de Cultura del GDF no haya tenido la sensibilidad necesaria para mudarla cuando menos a unas calles del Zócalo, o sobre la calle peatonal de Madero, desde el Zócalo hasta el Eje Central, se nota la gravedad de la situación por la que atraviesa la institución ante la falta de sensibilidad y de un buen operador al frente de la misma. No pierde la Secretaría ni la secretaria, pierde la institución que es esa feria, pierde la ciudad, pierden los lectores, pierden las editoriales, pierden los escritores, pierden los artistas que ahí se presentaban, pierden los no lectores, perdemos todos. Es una lastima la falta de sensibilidad de las autoridades capitalinas, sin lugar a dudas el desconocimiento e inclusive la ignorancia de lo que esa feria significa para la ciudad ha llevado a tomar una decisión con tintes de extinción. Quizás haya sido la feria del libro más exitosa del país, que en un gran momento hizo confluir a alrededor de un millón de personas en sus stands llenos de libros, en las tan importantes actividades artísticas, en las presentaciones de libros importantes, en las maravillosas actividades lúdicas para los niños y las académicas para todos. Es triste sentir que un espacio que le habíamos ganado al poder político de la ciudad y del país, ahora vuelve a ser un espacio muerto dispuesto para ser carroña en la disputa del poder. Podría decirlo con todas su letras: Que Descanse En Paz la Feria Internacional del Libro del Zócalo de la Ciudad de México.
Posted on: Mon, 07 Oct 2013 23:14:21 +0000
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