Acciones enrique jara 10-09-2013 Para: [email protected] Imagen de enrique jara CUARENTA AÑOS DESPUÉS: Muchos recordamos ese día, marchas militares invadían la programación radial, poco se sabía que pasaba, solo conjeturas y murmullos, temor, algunos confianza y alegria, luego se supo, salía el primer Bando militar, nos decía que había terminado un gobierno y comenzaba la intervención libertadora de la fuerzas armadas en Chile. Los días previos había escases, colas, poco pan, azúcar, arroz, aceite, muchos eran expertos en colas y en la picardía del chileno seguían el recorrido de repartidores y participaban en todas las que podían, para cigarrillos principalmente, botín preciado de fumadores, habían otros caza colillas, que en paraderos saltaban al atajo de “la corta” que dejaba algún fumador antes de subir a la locomoción. Pero si el día 12, todo termino, por arte magia, los negocios aparecían de la noche a la mañana abarrotados de comestibles, eficacia total de las nuevas autoridades, alegría en rostros ingenuos que apostaban a tal situación como verdad. Luego siguen otras historias, de miedos, de presos, detenidos, recintos de detención, rumores de muertos, fusilados, desterrados, exiliados, historias de personas que se ocultaban para ingresar a embajadas, algunos anecdóticos entre lo inverosímil ,se perdieron vecinos, amigos, conocidos, ¿me tocara a mi? aparece el SIM, primer servicio de inteligencia para dar caza a traidores. Hoy culpas y arrepentimientos van y vienen por doquier, justificación de la acción como el único camino también, historiadores, sociólogos, antropólogos,politicos, analistas se hacen presente con teorías y justificaciones de lo que paso, pero no hay respuesta a aquellos de todavía preguntan ¿Dónde están?, poca justicia para víctimas, que en la ignominia atroz, degollaron, fusilaron, prendieron fuego y quemaron, lanzaron al mar cuerpos y cuanta felonía más. Como olvidar, con justicia ausente, como olvidar si aún se escarba la tierra en pos de un hueso del ser amado, aunque sea eso para sepultar, como lo exige nuestra cultura occidental y cristiana, rendir tributo a nuestros muertos. Muertos que se niegan a aparecer, ¿porque serán ellos los que se escondieron?. Qué pena ver que en cuarenta años de historia, no podamos mirarnos a los ojos, no tengamos paz, imposible olvidar, olvidando no podemos aprender, solo aceptando podremos quizás algún día, si hay justicia y reparacion, perdonar. Enrique Edis Jara Rivera
Posted on: Wed, 11 Sep 2013 11:02:00 +0000
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