Economista Santos advierte lo que viene: "El gigante entregó su vida y las finanzas de la República" El economista venezolano Miguel Ángel Santos afirmó este miércoles que los seis meses, y no cien días, que lleva Nicolás Maduro gobernando han estado marcados "por los excesos de la última campaña electoral del gigante político, que dejó allí no sólo su propia vida sino también la de las finanzas de la República". Según el experto, fragmentación del presupuesto, excesos del gasto y la torpeza de la política cambiaria es el verdadero legado del Chávez. "Hay que sumarle la incapacidad del heredero para controlar a los capos de los diferentes bolsillos del tesoro de la nación", advierte. Santos asevera que para asegurar el triunfo electoral antes de su muerte, "Hugo Chávez compensó sus cada vez más esporádicas apariciones públicas con un gasto mayor. Así, incurrió en un déficit de 18% del PIB, que se financió imprimiendo dinero y recurriendo a los bancos para recoger los depósitos ociosos a través de emisiones de deuda interna". Como elemento de distorsión, el economista señala que para evitar la inflación, consecuencia de la debacle del aparato productivo, "el gobierno facilitó la entrada de niveles récord de importaciones". El resultado fue un crecimiento de la economía creció 5% y la cantidad de dinero creció 60%, a pesar de lo cual la inflación cerró en 20% (24% en alimentos). ¿Qué están pensando hacer? En una artículo titulado "Infierno I o Infierno II", Santos advierte que el escenario viene aún peor, puesto que "recortar el gasto público no es una opción". Afirma que el Gobierno planea llevar el déficit a 15% del PIB y financiarlo de nuevo a través de la impresión de dinero. En lo que va de año el PIB ha caído menos de lo que muchos esperábamos, pero la inflación estalló, 40% a nivel del consumidor y 55% en alimentos en los últimos doce meses. Peor aún, los seis meses de Maduro anualizados resultarían en 53% y 83% respectivamente. El gobierno sigue insistiendo en que tiene "recursos para atender la demanda de divisas" pero al ritmo de dos subastas mensuales por doscientos millones de dólares el Sicad apenas llegará a la mitad de lo que circulaba a través del Sitme. ¿Qué puede pasar en lo que resta de año? Imprimir dinero al ritmo requerido por los planes del gobierno equivaldría a un aumento de la liquidez por el orden de 72%. Ya esta última semana la cantidad de monedas y billetes en circulación resultó 66% más grande que hace un año. A este ritmo, con el PIB estancado o en los negativos bajos, sólo cabe prever una aceleración de la inflación. Y es que dentro de las restricciones ideológicas y de eficiencia con que funciona el gobierno de Maduro no hay muchas opciones. Sus dilemas esenciales seguirán siendo los mismos. Otra escenario es recortar el gasto para reducir el déficit, lo cual deprimiría la producción y el empleo con una inflación menor; o seguir imprimiendo billetes a mansalva y aproxima el PIB a cero, con una inflación (y devaluación) todavía mayor; o mantener los controles de precios, en cuyo caso la inflación será menor pero la escasez se desbordará. También podría liberar los precios y se aceleraría la inflación, con menor escasez. "Esas son las trampas en las que nos han metido. Se trata siempre de escoger entre infierno I o infierno II. Está claro que si bien en nuestra historia la relación entre el desempeño económico y la estabilidad política ha sido caprichosa, lo que se nos viene encima amenaza con llevar esa inconsistencia demasiado lejos". Hiram Aguilar Espina
Posted on: Thu, 01 Aug 2013 19:18:23 +0000
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