Nada está oculto delante de Dios. Puedes hacer cualquier cosa por Dios; puedes servirle y tomar acciones que parezcan servicio a Dios, pero él escudriña tu corazón y tus pensamientos. David instruye a su hijo, Salomón, en 1 Crónicas 28:9, diciendo: Sírvele con corazón perfecto. No es que tu servicio sea perfecto, pero tu corazón tiene que ser perfecto. Y continúa diciendo: Y con ánimo voluntario. No es tan solo tener la actitud correcta, sino que no sea algo obligatorio, algo impuesto. Dios no escudriña tus obras, sino el corazón y el ánimo con los que le sirves. Procura servirle con el corazón perfecto y con ánimo voluntario, no por condenación u obligación, sino porque sale de tu corazón el servir a Dios. Pastor Otoniel Font
Posted on: Sun, 06 Oct 2013 23:19:01 +0000
Trending Topics
Recently Viewed Topics
© 2015