Nuevas aventuras del duende ecológico entre 98-2000 Por.Alexander Bonilla D. Esta vez el duende ecológico me salió debajo de un árbol de guayaba, allá en Puriscal, en la finca de los Quesada, cuando llevaba alimento a Rubio. Dice el duende que no había vuelto porque andaban viendo y analizando el impacto de la minería a cielo abierto en la zona de Las Crucitas en San Carlos. Ellos están asustados porque esa empresa va a devastar como muchas hectáreas de montaña para sacar oro. Ahí en ese lugar vive una colonia de duendes, que ya están sufriendo por las explosiones y excavaciones que se han hecho en la fase de exploración. Dice que no quieren ni pensar lo que les pasará cuando dinamiten y entren excavadoras gigantes a revolver la montaña. Están pensando en un plan de evacuación porque en ese momento les será imposible vivir ahí. No saben para donde coger, porque por todo lado han talado las montañas. Le dije al duende que había gente que estaba de acuerdo con que se explotara el oro, porque les daba fuentes de empleo, le mejoraban los caminos, y traería desarrollo a la región. Es más, le comenté, el propio Ministro de Ambiente está impulsando la idea de que con los beneficios económicos que puede generar la minería se apoyan otras actividades de conservación de recursos naturales. No, no y no, dijo el duende. La minería solo daños y contaminación causará, especialmente con los químicos que usarán. Nosotros hemos escuchado conversaciones donde se han definido estrategias de promoción del proyecto de explotación del oro. Sabemos de personas que lo que buscan son beneficios económicos directos por la venta que harán a la empresa y de hasta financiamientos que se han dado para campañas de políticos de la región. Si esto no se para tendremos que buscar vida en otro lugar. Esperemos que los costarricenses nos ayuden a proteger nuestra casa, nuestro hogar.
Posted on: Mon, 02 Sep 2013 07:00:29 +0000
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