PALABRA DE BENDICIÓN. 071113. ELI Ediciones Una disciplina que debe acompañar todos los aspectos de nuestra vida es la auto evaluación. ¿Estamos encontrando plena satisfacción en lo que hacemos? ¿Esta relación que sostenemos está siendo nutritiva? ¿Han sido fructíferas las decisiones que hemos tomado? ¿Estamos construyendo esta relación sobre bases sólidas? La tendencia común en nosotros (tendencia por demás peligrosa) es la de evitar confrontarnos; enderezar interiormente lo chueco; negarnos a ver que las cosas no son como realmente se están dando... Dios, en su Palabra, nos llama a hacerlo: Evaluar y evaluarnos. Revisar si, en lo real y concreto, las cosas suceden como pensamos que ocurren en nuestras idealizaciones. Este es el pasaje bíblico: Pues así ha dicho Jehová de los ejércitos: Meditad bien sobre vuestros caminos. Sembráis mucho, y recogéis poco; coméis, y no os saciáis; bebéis, y no quedáis satisfechos; os vestís, y no os calentáis; y el que trabaja a jornal recibe su jornal en saco roto (Hageo 1: 5- 6) En efecto: Podemos pasar la vida sembrando y no notar (por la tendencia humana a maquillar la realidad) que no estamos cosechando gran cosa. Los resultados de lo que hacemos deben ser evidentes. Y, por supuesto, si en la confrontación valiente con los hechos reales, sucede que no está funcionando, debemos preguntarnos si vale la pena continuar o no. Recibir el jornal en saco roto es lo mismo que estar trabajando en vano. Recibir el jornal en saco roto es lo mismo que reconocer que estamos invirtiendo mal nuestra vida. ¿Por qué, entonces, nos mantenemos en algo que no funciona? Existen varias razones, pero, hoy, destacaré tres: 1. El miedo a reconocer que nos equivocamos. 2. La comodidad mediocre de pensar: más vale malo por conocido, que bueno por conocer 3. El miedo a volver a comenzar. Un hijo de Dios no debe temer. Podemos habernos equivocado. Lo verdaderamente triste sería seguir viviendo en el error. Mi ánimo, pues, querido lector, para que, este día, medites con valor en tus caminos. Y si, al final de la evaluación, encuentras que te equivocaste y es necesario comenzar de nuevo, toma la mano de Dios, pide su dirección, y vuelve -con valor- a empezar. Mi Señor, quien ha preparado hermosas bendiciones para sus hijos, nos otorgue el discernimiento y valor de reconocer y evaluar lo que, realmente, estamos viviendo. Pastor Julio Daniel Vega Iglesia Cristiana Agua Viva! byos @live.mx Hospital Star Médica de Luna Parc Consultorio 1521 (Escucha un Mensaje de Bendición, visitando en Youtube: ELI Palabra de Vida)
Posted on: Thu, 07 Nov 2013 04:34:34 +0000
Trending Topics
Recently Viewed Topics
© 2015