Un cumpleaños mojado Resulta que hace muchísimos años, el viejo un día me dijo que a partir de ese momento la responsabilidad del mantenimiento,mejoras o lo que fuera necesario hacer en la casa, era mía: y así fue como, mudados ya a donde vivimos desde hace años, harto de arreglar y arreglar el techo, y que goteara igual cada vez que llovía, resolví hacerlo de nuevo. Para evitar problemas futuros, decidí que lo mejor era desarmar toda la parte de atrás, desplazar la cumbrera y elevarla, y conseguir mas pendiente y un techo a dos aguas, simple y efectivo. Esperamos a días despejados, incluso esperando a que pasara una tormenta, y el día elegido resulto espectacular: ni frió ni calor, despejado, soleado, ideal para lo que teníamos que hacer. Y en efecto así fue: ese 19 de septiembre fue buenísimo! Pero lamentablemente no conseguimos terminar, nos quedó un pequeño sector y se venia la noche, lo tapamos cuidadosamente con plásticos que aseguramos bien, para terminar la mañana siguiente. Cayó la noche: estrellada, sin una nube, cielo límpido... Cenamos y nos fuimos a dormir, en unas horas era el cumpleaños de papá. A las cinco de la mañana me desperté con una sensación rara: oía caer agua, y pensé que algo había pasado con el tanque, escuchaba el agua dentro de casa, y años antes ya habíamos pasado por un desborde similar. Me levanté, prendí la luz y me dí cuenta que el ruido que oía era de afuera: diluviaba!! De donde salió esa tormenta, no lo sé! Pero el viento soplaba muy fuerte, llovía a cantaros .... y en el hall de la planta alta, un chorro de agua entraba alegremente por el taparrollos de la ventana y caía directamente sobre el televisor!!! Corté la luz, desenchufe el televisor,lamparas, todo lo eléctrico que pudiera verse afectado...y empece a buscar cacerolas, ollas,baldes, floreros...todo lo que sirviera para recolectar agua: las goteras se multiplicaban!! De pronto papá se levanto y vino a ver que pasaba. Con la locura que tenía ni me avive de felicitarlo. Y se pasó horas conmigo vaciando tachos,baldes, ollas, cacerolas! No paraba de llover, y el agua entraba y entraba, y como le dije que seguramente el viento había arrancado los plásticos, iba a subir: Tene mucho cuidado, por favor, me dijo. Creo que se dio cuenta como me sentía de culpable y no quiso prohibirme que lo hiciera, al fin y al cabo ya era un arquitecto hecho y derecho. En efecto, el viento había volado todo: coloque de nuevo mas plásticos en mas capas, los aseguré con pilas de tejas, doblé la canaleta para que el agua fuera para afuera..y bajé, empapado pero bien y no me olvido la cara de alivio del viejo. Llovió hasta casi las seis de la tarde. Por suerte no pasó nada irreparable: lavamos las alfombras, el televisor se secó solo, como debe ser, y una semana después estaba funcionando, si tuve que hacer pintar toda la planta alta... Cuando el día terminaba, y con papá y mamá nos preparamos a cenar, después de un día larguísimo y un cumpleaños frustrado, le pedí disculpas: me sentía mal por papá. Si creyera que fuiste irresponsable y no trataste de prever las cosas, estaría enojado, pero son los riesgos que se corren cuando se hacen cosas, fue lo que me contestó. Viejo, pasan los días, pasan cosas y de golpe me acuerdo: cuantas cosas me enseñaste, y cuanta paciencia me tuviste siempre! Fuiste el mejor padre que se puede tener!!
Posted on: Thu, 19 Sep 2013 23:22:23 +0000
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