Ya hemos hecho notar que la economía es un sistema dinámico. Podemos ahora además caracterizarla como un sistema no lineal. Los economistas han reconocido la existencia de relaciones no lineales en la economía desde que Turgot articuló la ley del rendimiento decreciente en el Siglo 18. Podemos ver también la no linealidad intuitivamente en nuestra vida económica de todos los días, que va desde el paso acelerado del cambio tecnológico hasta nuestra tendencia de prestar menor atención a un comercial la quinta vez que lo vemos. El trabajo estadístico también muestra evidencia de lo no lineal en la información macroeconómica desde la producción industrial a los datos de desempleo. Mientras la economía ha reconocido desde hace mucho la existencia de no linealidades, ha debido enfrentar tiempos difíciles incorporando esa característica en una forma dinámica. Debido a que los sistemas dinámicos no lineales no eran comprendidos claramente sino hasta hace relativamente poco tiempo, los economistas tradicionales históricamente lo que han hecho es utilizar las relaciones no lineales en modelos estáticos o bien utilizar la relación en modelos dinámicos, donde, en cada caso, las ecuaciones podían ser resueltas. Por el contrario la economía como sistema complejo ha reconocido que la economía es ambas cosas: no lineal y dinámica y como resultado utiliza herramientas matemáticas y simulaciones de computador que solo han sido desarrollados recientemente. Una pregunta natural surge ¿es la economía caótica? Esta cuestión generó mucho interés en la década de los 1980, particularmente alrededor de si el mercado de valores era caótico (y por supuesto, si con conocimiento de esto, estaría alguien en capacidad de hacer un montón de dinero). Ha existido subsecuentemente mucho trabajo sobre este asunto, y el consenso actual es que “probablemente no”. Resulta difícil ser concluyente con esta cuestión debido a que el caos es difícil de distinguir de otras conductas complejas pero no caóticas y ciertos tipos de conductas aleatorias. Pruebas o el “testeo” del caos requiere también una enorme cantidad de datos e información y ningún mercado financiero tiene data suficiente para un resultado concluyente. De The Origen of Wealth. Evolution, Complexity, and the Radical Remaking of Economics por Eric D. Beimhocker.
Posted on: Mon, 02 Sep 2013 23:27:52 +0000