No seríamos justos si quisiéramos simplificar o camuflar estas situaciones desesperadas, ni si las obviáramos para no enfrentarnos al siempre postergado debate sobre la eutanasia. Hace menos de una semana, un hombre de 86 años mató a su mujer, de 83, y se suicidó. Ambos vivían en Asturias, o digamos mejor que residían; vivir es algo más. Ella tenía síndrome de Alzheimer en fase terminal y él, desesperado, decidió que había llegado el momento de morir ambos, según apunta la investigación policial. blogs.elconfidencial/espana/palabras-en-el-quicio/2013-08-23/y-si-espana-tampoco-fuera-pais-para-viejos_20363/
Posted on: Fri, 23 Aug 2013 06:59:58 +0000